domingo, septiembre 21, 2008

Poesía a mi anónimo

Tengo un anónimo que me ronda últimamente y de alguna forma quería agradecerle que me suba los números en cuanto a visitas, que ya era necesario, jeje. Así que he decidido escribirle algo para ver si así se le baja la tontería o consigue hacer amigos y así hacer más cosas interesantes que leer mi blog e intentar estropear mi relación conyugal. Cosa que ni hoy ni mañana ni nunca conseguirá.

Anónimo es signo de debilidad,
frustración, miedos, y rencor
y envidias por alguien mejor
o con algo que se desea
con un ansia mayor.
Si tuvieras valor me llamarías
y yo amablemente te aplaudiría
por la señal de coraje y valor.
Si tuvieras pruebas reales las darías
pero los celos te invaden y
la lengua va más rápido que tu cerebelo
en cuanto a pensamiento se refiere.
Las mentiras son propias de niños
o de mujeres insatisfechas.
Si ves cosas que no suceden
problemas grandes tienes.
Desquitarse anónimamente
es signo de carencias emocionales.
La confianza es un don
concedido a pocos mortales.
Nuestra casa es el mayor nido de amor,
un gran regalo de dios.
Tener celos de una tremenda mujer como yo
es un signo de comparación y por tanto humillación.
Si te tuviera delante no sabes cuantas cosas saldrían
no de mi boca, sino de mi mano, uñas y dientes
que al salvaje oeste ganaba yo siempre
por peleona y con muy mala leche.
Cuida tu espalda y también tu frente

no te vayan a dejar la cara caliente
por esa personalidad patética e indecente.
En mi casa quien esconde la mano
pone la cara, en pocas palabras.
Desaparece y no vuelvas por aquí
que en este blog no eres bienvenid@
por tus intenciones malversadoras,
tu carácter agrio y supongo tu cara de pepino,
que para hacer el ridículo hay otros sitios.
Te deseo una vida entera llena de fracasos,
humillaciones y sueños rotos para que compartas
con alguien de tu misma calaña.
Para que tengas buenos días
allbran cada día.
Para que me dejes tranquila
esta poesía.
Para que tengas buenas intenciones
dos ostias como panes.
Para no aburrirte
cómprate una tele.
Que tengas un buen día
lleno de penurias y mala compañía.
Un saludo cariñoso
de esta tremenda moza
que quiere deshacerse de ti
muy pronto.

No soy poeta ni lo seré ni quiero serlo. Era una tontería como gracia para reirme de el anónimo y sus intenciones. Ojalá que el perro del hortelano (mi anónimo) ya que no puede comer me deje a mi comérmelo (a mi maridito). Porque soy feliz y la envía es muy mala, porque él es mio y yo suya al 100% y la confianza es la base de las relaciones, aprende la lección, al igual que el respeto, fidelidad, comprensión, ayuda, cariño, ponerse en el lugar del otro, pensar en la otra persona antes que en uno mismo, etc... Yo tengo todo eso y la vida me sonríe, ¿qué más puedo pedir? Sólo una cosa, que pasen pronto estos trece días para amanecer cada mañana a su lado y que dentro de un tiempo podramos engendrar a nuestros bichitos particulares.
Así que adiós, con toda mi alegría a ese anónimo que tanto se y me aburre y que hace el ridículo.

2 Comments:

Ángel Serrano said...

Pláceme la ocasión que de nuevo se me brinda, de dejar constancia de anteriores escritos míos, que al pelo le vienen al caso.

Sea.

http://unhellsv.blogspot.com/2008/04/la-mala-lengua-v20_23.html

Mara said...

yo he dicho más o menos lo mismo pero con mis palabras y mi humor extraño.
me ha gustado leerlo. un saludito